El Compromiso de los Católicos en la Política: Defendiendo la Dignidad Humana
La participación activa en la vida política es un deber y un derecho para los católicos. A través de la política, podemos contribuir a establecer un orden social más justo y coherente con la dignidad de la persona humana. En este artículo, exploraremos cómo los principios de la doctrina católica nos guían en nuestro compromiso político y cómo podemos aplicarlos en el contexto de las próximas elecciones en México.
La Enseñanza Constante
Desde los primeros siglos de la Iglesia, los cristianos han cumplido sus deberes de ciudadanos, participando en la acción política. Muchos santos han servido a Dios a través de su compromiso en actividades políticas y de gobierno. Entre ellos, Santo Tomás Moro, proclamado Patrón de los Gobernantes y Políticos, defendió la inalienable dignidad de la conciencia y afirmó que “el hombre no se puede separar de Dios, ni la política de la moral” 1.
En las sociedades democráticas actuales, todos tienen la oportunidad de participar en la gestión de la cosa pública. La participación política es esencial para promover el bien común, que incluye la protección de la vida humana, la paz, la justicia y la solidaridad. Los fieles laicos, de acuerdo con su conciencia cristiana, deben contribuir a animar cristianamente el orden temporal, respetando su autonomía y cooperando con otros ciudadanos 1.
Santo Tomás moro, patrono de los gobernantes y políticos decía: "El hombre no se puede separar de Dios, ni la política de la moral"
Principios Éticos en la Política
Respeto a la Vida Humana: El valor principal es el respeto a la vida humana. Si un candidato favorece el aborto o la eutanasia, no respeta al ser humano y no debe recibir nuestro voto, incluso si parece bueno en otros aspectos.
Jerarquía de Valores: Debemos discernir objetivamente cómo los candidatos han actuado en el pasado. La ley natural, accesible a la razón, nos guía en la búsqueda del bien común. Ningún gobierno o político puede confundirse con el Reino de Dios.
Evitar Mesianismos Políticos: Cuidado con los líderes que se presentan como salvadores de la humanidad. Ningún partido representa a la Iglesia, y los católicos pueden votar libremente por quienes respeten la ley moral natural y sirvan al bien común 2.
Ejemplos Prácticos
Aborto y Eutanasia: Un candidato que promueva estas prácticas atenta contra la vida humana y no debe recibir nuestro apoyo.
Corrupción: Evaluar la integridad de los candidatos. La corrupción socava la dignidad humana y el bienestar de todos.
Justicia Social: Apoyar políticas que busquen la igualdad, la paz y el respeto a los derechos humanos.
La participación política es esencial para promover el bien común, que incluye la protección de la vida humana, la paz, la justicia y la solidaridad
Conclusión
Como católicos, debemos votar con responsabilidad, basándonos en principios éticos y en la defensa de la vida. Nuestra participación política es una oportunidad para ser sal y luz en el mundo, preservando de la corrupción y mostrando la verdad. ¡Que nuestras decisiones reflejen nuestra fe y contribuyan al bien común! 🙏🗳️
Bibliografía
Congregación para la Doctrina de la Fe. (2002). Nota sobre el compromiso de los católicos en política. Recuperado de aquí
Opus Dei. (2003). Los católicos y la vida política. Recuperado de aquí
Catholic.net. (s.f.). Guía para discernir el voto católico. Recuperado de aquí